Desarrollo Sostenible con equidad económica y social
Hoy, y la realidad y los sucesivos acontecimientos mundiales en los más diversos países lo demuestran, no basta con plantear un desarrollo desde el punto de vista sólo ecológico o ambiental en el sentido conocido desde los años 70.
No es posible plantear seriamente y esperar que pueda concretarse una acción de planificación del desarrollo que convoque el interés de ser parte de ella a los individuos, que no tenga carácter participativo , en su debate y consenso ( sin perjuicio que la ideación pueda surgir de un equipo especializado), que sea justo económicamente, reparando el inmenso daño causado a familias, personas y regiones durante 5 décadas, y que contenga el concepto de equidad, que no significa necesariamente una igualdad sino el equilibrio entre necesidad y deseo y en la dación de las oportunidades para que cada quien libremente pueda organizar su vida, su presente y su futuro con razonables garantías de éxito.